«Mientras pienso detengo el movimiento, no el corazón»…
Duelen de igual manera los silencios y las palabras que quisieron llegar y se perdieron en el camino.
Nadie fue a recibirlas…
Las puertas se cerraron bajo la incomprensión.
Duelen las pausas que no se entienden, las que olvidaron la lógica…
Callamos para respetar silencios, para no dañar sentimientos.
Se amarga el dulzor de una emoción…
A veces los silencios son eternos en el ruido mudo de unas palabras que jamás retomarán voz…
Ayer hablaron…
Hoy, decidieron callar…
Cierto, a veces necesitamos estar en silencio y dejar que la ausencia de voz de nos haga sentir.
YO lo hago una vez al año. Os aseguro que funciona.
Gracias.
Gracias Antevasin…
Son los silencios quien más palabras saben hablar…Un abrazo.
Solo conoceremos el poder del silencio si nos detenemos a escucharle…
Hermoso poema!!
Hola Pilo, tienes un hermoso blog repleto de bellas letras, si me lo permites me quedo a leerlas. Te invito a un cafecito en mi blog.
Saludos
Claro que sí, Gilberto…
Un abrazo y gracias por tus palabras…
Ha decir verdad a medida que me hice mayor los silencios en si no existen para mi, siempre oigo un sssssssss en mis oídos. Mis silencios del alma me acompañan siempre y son bien míos. Abrazos y dulces silencios del alma. Josep
Es cierto , las pausas son necesarias , para pensar y decidir con más claridad , lo que, apurados no apreciamos….y ya alguna vez hemos hablado de los silencios…en ciertos momentos son nuestra mejor compañía…yo me acostumbre a «escuchar» los silencios de Emilio….y nunca oí palabras tan bellas….por eso disfruto tanto de mis silencios…nunca estoy sola….eres muy sabia eligiendo temas de conversación…un abrazo…