Alas para el respeto…

      1 comentario en Alas para el respeto…

 

 

 

Quise que volaras con absoluta libertad para que tus alas no cerrasen la puerta a las oportunidades…No soy quien para aconsejarte; solo espectador de tus vivencias, no el sentimiento de tus sensaciones.

Lo que tú sientes es tuyo; lo que tú tienes, lo has ganado tú con tesón y esfuerzo. ¡Protégelo!

Únicamente puedo opinar desde la barrera de la confianza, del cariño que me une a ti, de un respeto que han sembrado los años con esmero, y debo alejarme cuando seas tú quien decida qué camino tomar frente al rumbo que te brinda la vida…

Veo tus ilusiones como ésa recompensa a un esfuerzo importante para ti, el logro de tus anhelos, la carne que pusiste en el asador y dejaste al punto para paladearla. Es ahora tu momento. ¡Saboréalo y disfrútalo!…Estaré siempre a tu lado, como sombra tranquila que vive contigo.”

 

Creo que dejar volar alas, desplegarlas en su totalidad, es batir los remos contra el miedo y la incertidumbre…Dejar volar alas es creer en los sueños, expandir ilusiones…y más aún cuando estamos dentro de una realidad que quizá nos resulte demasiado “real”

Cuando llegamos a ser nosotros mismos gestionamos tanto nuestra vida como el tiempo y los deseos. Evitamos ser marionetas de unos remordimientos que surgen de la nada, de una incertidumbre que no dispone de apellidos, que es la ficción de una quimera…

Vuela, y no dejes de sentir una libertad ausente de cualquier tipo de cadenas…

 

Pilar Cruz Gonzalez

Acerca de Pilo Cruz

No me gusta complicar lo que considero sencillo. Estoy en perpétuo estado de aprendizaje. Aún tengo muchos sueños por cumplir, y disfruto de los que ya soñé cuando anduve despierta. Aprendo cada día mirando a los ojos de quien me mira, escuchando palabras no habladas por mi, y sintiendo el sentir de los demás. Soy un aprendiz de la vida...

Un pensamiento en “Alas para el respeto…

  1. Vicente García-Bueno García

    Sólo el silencio… Sólo el silencio y dejar sentir tus palabras aquí dentro, muy dentro.
    Qué grandes Pilar. Qué grande cuando escribes y amanece en tu almohada… Qué hermosa eres Pilar. Qué hermosa cuando lees tus palabras o las de aquel/aquella que tiene esa suerte.
    …. ….un beso.
    Vic.

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