Dedicado a una persona muy especial para mi…¡Felicidades!

Hoy mis sentimientos son para ti, en este especial rincón donde las palabras no se aferran a cadenas y se expresan con la libertad que el corazón dicta…

No podía callarme lo que tú significas para mí…Son mis sentimientos quienes «necesitan» contarte lo que a continuación vas a leer…Está dedicado exclusivamente a ti porque tú hoy eres quien debe llenar este espacio, el más importante, nadie más. Es mi regalo para tí. No podía ser menos…

No todos los días se cumplen años, y menos los que hoy cumples tú: “taitantos” …

¡FELICIDADES!

No podía dejar de expresar, sin pudor, sin esas cadenas de la timidez que tanto me frenan, mi personal felicitación a una persona a la que quiero, por encima de todo, a quien respeto y admiro desde hace la ventolera de 38 años. Tú.

Llegué a tu vida con apenas 12 años, y mi vida se unió a la vuestra endulzado por ese “amor de juventud” que me regaló “nuestro Julio”. Ése fue el regalo que el cielo me tenía preparado…Pensar en ti me hace revivir el sonido tan especial de un 1500 que advertía vuestra presencia en nuestro Pozuelo del alma, o nuestra Gandia. Ahí las emociones surgían aceleradas. “Julito llegaba con sus papas y Mari Carmen. Le esperaban los Madelman, una moto dispuesta para recorrer terrenos de la inocente juventud y risas. Eran en esos momentos cuando yo sentía que la vida era un espacio de total felicidad!”…Y cuando venías de trabajar, tras aparcar el coche en la puerta de casa, nos mirabas a cada uno de los miembros de la pandilla y nos expresabas ese siempre “hola” de bienvenida, entre sonrisas y beneplácito a nuestra alegría y complicidad. Ese saludo me transmitía un cariño especial que a día de hoy sigo manteniendo intacto. Combinabas a la perfección muecas de seriedad con gráciles dosis de ternura hacia nosotros, jóvenes que comenzaban a explorar el mundo de las ilusiones y la amistad.

La vida en sí no nos lo pone fácil, nos hace luchar para saber el valor de los sentimientos y de aquello que poseemos. Tú lo sabes bien pues eres “maestro” en este aspecto, y a cada una de las dificultades por las que has tenido que enfrentarte, las has aliviado con dedicación y esmero, con una fuerza interna única, una sabia “tirita” de curación frente a la adversidad…Habiendo piedras en el camino has ido retirando una a una, aunque te haya supuesto un esfuerzo extremo, sin mirar atrás, oteando tu horizonte para confiar en alcanzar vencerlas.

Eres diestro venciendo obstáculos, gran lección que aprendiste nada más ver la luz de la vida, cuando naciste acompañado de tu hermana, luchando ambos por salir adelante y vivir. El cielo no te lo puso fácil desde el momento de tu nacimiento, pero te concedió la aureola de un ángel para que te sintieras protegido en realidades de mayor necesitad.

Ningún paso dado ha supuesto freno para  tus determinaciones, cumpliendo tus objetivos, subiendo y bajando peldaños de dificultades que intentaban frenar tus acciones vitales y salpicar de dolor tus afectos (eres una persona extremadamente sensible, a quien los problemas ajenos afectan como suyos propios, y quien prefiere mostrar sonrisas antes que lágrimas. Ésas, sin duda alguna, te las guardas para ti, para mojar tus silencios en vez de salpicar con ellas).

Y cuando la vida decidía pellizcarte con el sabor de la amargura, poniendo a prueba tu capacidad de reacción, jamás te diste por vencido, saliendo victorioso, a pesar de sufrir, de sudar lagrimas de incertidumbre, con el esfuerzo a cuestas día tras día. Tesón y disciplina han sido lecturas aprendidas en el aprendizaje de tu enseñanza personal, y lo hiciste tú solito, sin que nadie te enseñara, porque “debías” hacerlo, sin preguntarte más, sin darle demasiadas vueltas al entendimiento porque la razón era inocente compañía que te custodiaba desde la niñez. Sabías que si querías una vida medianamente feliz tenías que dejar actuar a tu equilibrado sentido común. Y así has hecho siempre.

Puedo decir alto y claro que “rendirte” JAMÁS tuvo sitio ni en tu pensamiento ni en tu conciencia. Es una palabra que en tu vocabulario se ha borrado porque no has hecho uso de ella. No te lo has permitido. Nos lo has dejado claro a tu familia, quienes hemos –y seguimos- aprendiendo de ti: del valor que tienen tus recuerdos (extraes de ellos lo positivo, no lo que te puede lastimar demasiado), de tu sabia experiencia, de tu cordura a la hora de dar pasos firmes en el suelo de la coherencia. Buscas soluciones en vez de crear problemas, y lo haces desde el lado de la discreción, la prudencia y el amor, sin asomarte excesivamente para que no se “vea” demasiado tu ayuda, pero estando siempre a nuestro lado…Eso solo lo saben hacer las personas GRANDES como tú.

Eres un marido, un padre y un abuelo ejemplar, y es que el amor es la columna básica necesaria para la placidez de tus días y de tus noches. El cielo también brindó a tu suerte una “compañera de viaje” con la que llenar de luz y vitalidad el amor, quien unió su mano a la tuya para caminar juntos, y crear una hermosa familia, quien da vida a tus sonrisas y fuerza a tus sueños, quien vela, mima y cuida tu bienestar.

Tus huellas, para la familia, son el recorrido de la constancia, del esmerado cariño y de la prudencia, sin permitir a los hijos y nietos que nos demos por vencidos ni nos rindamos ante las dificultades, utilizando palabras que van directas a nuestra tranquilidad para hacer de lo complicado algo sencillo (al menos así nos lo haces ver a nosotros, aunque para ti sea más que espinoso).

Siento que tenemos algo en común. Tú tuviste dos padres: “uno” de leche, y “otro” biológico. Yo tengo dos padres: a “uno” le conocí cuando nací, y a “otro” cuando tenía 12 años…¡Y encima los dos os llamáis “Julio”!

Gracias con toda mi alma.

No cambies nunca…Cada uno de tus matices emocionales te hacen ser tan especial como eres, como te vemos quienes te queremos.

¡Y ahora lo que toca es disfrutar de este nuevo año que comienza para ti!

Gracias por existir, y por mostrarnos tantas y tantas enseñanzas de vida. Sin duda, un regalo celestial para todos nosotros.

(PD: te iba a dar estos sentimientos escritos en una hoja, a mano, pero he preferido compartirlos contigo desde aquí, donde sé conectar con mis sentimientos libremente…Espero que no te importe que hayan otros corazones que también conozcan el sentir del tuyo propio. Es un orgullo para mí que así sea.)

 

Pilar Cruz Gonzalez

Acerca de Pilo Cruz

No me gusta complicar lo que considero sencillo. Estoy en perpétuo estado de aprendizaje. Aún tengo muchos sueños por cumplir, y disfruto de los que ya soñé cuando anduve despierta. Aprendo cada día mirando a los ojos de quien me mira, escuchando palabras no habladas por mi, y sintiendo el sentir de los demás. Soy un aprendiz de la vida...

Un pensamiento en “Dedicado a una persona muy especial para mi…¡Felicidades!

  1. Milagros

    HAY PILO LO ACABÓ DE LEER; Y ES PRECIOSO LO QUE AS ESCRITO, SERA EL MEJOR REGALO QUE LE HAN ECHO, DA GUSTO LEERTE ASTA ME HE EMOCIONADO, GRACIAS PILO POR COMPARTIR TAN BELLAS VIVENCIAS. UN FUERTE ABRAZO !!!!

    Responder

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *