Escribo mientras pienso, retirando el guiño molesto de la despistada inspiración.
DESato una crispación.
DESnudo mi alma.
DEScribo mis sensaciones,
Me DESoriento buscando una idea…
Y si no me queda más remedio…me DESpido de cualquier palabra que DESuna mi coherencia.
Es el DESvelo de mi paciencia…
Conecto con el corazón para que dicte éstas líneas, porque lo único que puedo hacer es escucharle…
El pensamiento se alía a mi atención pero no me detengo en ningún detalle…
Se me escapan cientos de ellos…
Son las tímidas palabras quienes a base de tiempo guían mis pausas…
Esperan, los minutos que hagan falta, sin rechistar, sin hacerse notar…
Quieren ayudar mientras permanezco callada en mi interior…Pero las conozco, y sé que están ausentes.
No quieren hablar. Solo han de suspirar mi paciente confianza.
Mi boca yace en el remanso de la ausencia…
Los parpados entornan el paso de la comunicación…